¨Cuando
tenia catorce años, me visualice, y ahora estoy viviendo lo que imagine¨ son
las palabras con las que Luis Carlos ¨chuin¨ Clavijo – como le dicen sus amigos
-, rememora el inicio de su carrera.
En
1963 cuando en el norte del mundo se planeaba asesinar al hombre más
poderoso de la época, en el sur nacía un niño, un niño que 49 años mas
tarde traería a los cucuteños, el reconocimiento de su identidad. Estudiante
promedio y un excelente deportista chuin pasaba sus días nadando en la piscina
de la ciudad, que era su lugar favorito por aquella época con tan solo 8 años
de edad. El fruto de este pasatiempo son las 120 medallas que guarda en un cajón
en algún rincón de su casa, Y que
mantiene como una prueba del ciclo, que tenía que vivir, para poder avanzar en
su formación.
Estudio
hasta sus 16 en el colegio Calasanz, en la ciudad de Cúcuta, de la que se despediría
ese mismo año, con el anhelo de encontrar su verdadero yo, el destino que en
aquel tiempo rondaba la cabeza de ¨chuin¨ era estados unidos, que seria el país
que le permitiría conocer la verdadera sensación
de ver el mundo con sus propios sentidos. Al regresar a Cúcuta con una nueva
mentalidad quería estudiar medicina, pues pensaba que era la mejor manera de
ayudar a la gente, pensamiento que tuvo que posponer ya que pensaba que la
medicina occidental no le aportaría lo que estaba buscando. el siguiente viaje
de chuin, traería mas que buenas oportunidades, al viajar a Bogotá quiso
emprender su vida de cineasta, pero corrió con tan mala suerte que fue
expulsado de la escuela de cinematografía, junto con otras dos personas – que serian
mas adelante, sus mejores amigos- ¨con ellos era libre de hacer, trabajaba con
la luz, con la sicodelia, y a pesar de ser 10 años menor, nunca se quedo atrás en
su madurez intelectual.
Algunos
meses después el nuevo trió, tomo la decisión mas importante, esa que cambiaria
sus vidas para siempre, quisieron emprender un nuevo viaje, pero esta vez atravesarían
el océano atlántico, pues su destino era la ciudad de las luces, si esa misma
que plasmo Claude Monet en sus pinturas impresionistas, parís. En un país que había
acabado de pasar por un mandato socialista, que le abriría las puertas
al arte y la cultura, Luis Carlos Clavijo vio la oportunidad de trabajar en la
calle, como artista. Un extranjero Colombiano en las tierras de Roberspierre, viviendo la vida, España,
Italia, suiza todos fueron puertos en los que chuin un día atracó.
Al
cabo de un año, y en una calle parisina, chuin conoce su destino, al
encontrarse al hijo de Marcel Marceau, quien lo invitó a hacer parte de la escuela de su padre, al llegar allí su
cuerpo, su mente, y su espíritu supieron que estaban en el lugar indicado ¨esto
es genial, es lo que yo quiero hacer¨ fueron los pensamientos de chuin en ese
momento. Fueron tres años de preparación, física y espiritual, en los que aprendió
sobre los sentimientos los pensamientos, las emociones, y la gracia de un mimo;
que culmino con un éxito rotundo, pues fue uno de los pocos que lograron
obtener su diploma.
Su
talento era el pasaje que necesitaba para estar al lado de aquel mimo famoso,
estados unidos, Singapur, indonesia, Balí fueron algunos de los 36 países que
chuin recorrió, en su vida nómada por Europa, y fue precisamente en este ultimo
donde, descubrió la medicina oriental, los masajes, la acupuntura una honda mas
espiritual, que seria su orientación en el 2010. Su paso por Europa le permite
ver la realidad suramericana, esa realidad de conquista y sumisión, que lo
llevan a realizar sus proyectos con miras, al reconocimiento de la cultura de
su tierra, por sus mismos habitantes; Como Aquí nació, Colombia que reflexiona
acerca del importante papel que jugó Cúcuta en el desarrollo de Colombia como
la conocemos. Pero su trabajo no solo se queda allí, pues como hombre
espiritual, ama compartir su capacidad de conocimiento, con los demás y alterna
su trabajo como director de cine, con el de profesor de teatro, que le permite
compartir con los jóvenes. En vista de su reconocimiento en el mundo del arte,
en el presente año le fue asignada, la directiva de inauguración de los juegos
nacionales que llevara a cabo junto con su esposa Catherine Courtain -francesa
de nacimiento-, que le apoya incondicionalmente desde que se conocieron en parís.
¨Y aunque soy un alma muy vieja, tengo muchas vidas por delante¨ es la ultima
frase que le oigo decir antes que sus brazos rodeen mi cuerpo y se aleje dejándome,
el peso de sus recuerdos, en las manos.
Para
saber a donde se va, ahí que saber de donde se viene…. Chuin Clavijo
para la palabra libre Kelly Rico
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